OMAR QUESADA ANUNCIA QUE EL XXIII CONGRESO APRISTA NO APOYARÁ A DEL CASTILLO NI A MULDER - DIARIO LA RAZÓN 05.03.10

Movimiento de los “cuarentones” impulsa surgimiento de nueva clase política

VICTOR ALVARADO

Omar Quesada, anunció en vísperas del XXIII congreso nacional del partido aprista que en este evento los delegados que apuestan por la renovación partidaria trazarán una línea divisoria que marque un alejamiento con todo lo que signifique corrupción y paralización de la organización partidaria para vincularse de nuevo con el pueblo y volver a ser llamados “partido del pueblo”.

Quesada, en lo primero, enfiló sus baterías contra los militantes apristas como Jorge del Castillo, procesados por el sonado caso de los “petroaudios”, algo que no dudó en calificar como un grave caso de corrupción que ha hecho un gran daño al gobierno aprista. En lo segundo, a Mauricio Mulder, actual secretario general, a quien responsabilizó de la pérdida de liderazgo y presencia del partido en el interior del país, al divorcio de la dirigencia nacional con las bases y haber renunciado al combate contra los extremismos políticos imperantes en el centro-sur del país.

¿Qué significado tiene el movimiento de renovación partidaria bautizado como los “cuarentones” que Ud. lidera dentro del APRA? Nuestro compromiso es fomentar una nueva clase política, por eso creemos que el triunfo de la renovación en el APRA, que tendrá lugar en este congreso, va a ser el inicio de la renovación de la clase política en el país y en esta línea yo invito a los jóvenes del PPC, lo que era la Izquierda Unida, de Acción Popular y los otros partidos a levantar las banderas de la renovación.

Pero, hay dirigentes como Jorge del Castillo que están procesados por el caso de los petroaudios, ¿cómo compaginarlo con el proceso de renovación que alienta? La corrupción del caso BTR le ha hecho un grave daño al Gobierno. El APRA no tiene que pagar la culpa de algunos de sus militantes que fueron vergonzosamente a hacer arreglos a la suite de un empresario que no tenía intenciones de participar limpiamente en licitaciones, para ellos demandamos las mayores condenas por haber puesto en tela de juicio la honorabilidad de mi partido. Los delegados van a trazar una línea divisoria que marque un alejamiento con todo indicio o sospecha de corrupción.

El actual secretario general Mauricio Mulder está empeñado en reelegirse y estaría buscando una transacción con los que alientan la renovación partidaria. El compañero busca la re-reelección, hay que tener en cuenta que fue elegido en el 2004 y prolongó su mandato en el 2006-2007 y frente a esta pretensión hemos levantado la bandera de la revolución mexicana que Haya de la Torre nos repetía: “Sufragio efectivo, no reelección” Y en el futuro cuando hayamos asumido la dirigencia partidaria, estableceremos también la no re-reelección en la selección de los nuevos parlamentarios apristas.

¿Cuál es el balance de la dirigencia partidaria que ustedes cuestionan y pretenden renovar? El partido necesita recobrar el liderazgo, de políticas que correspondan a la demanda ciudadana y para eso necesitamos un partido que tenga presencia en todo el territorio nacional, lo que no ocurre en este momento, y asumir el desafío de dar un combate ideológico a los extremistas de derecha e izquierda, sobre todo en el centro-sur del país, donde hay mucho discurso antiEstado y antisistema que le hacen el juego a la violencia senderista.

¿Aceptaría un acuerdo transaccional para que exista una dirección colegiada o que usted sea subsecretario general? La experiencia nos ha demostrado que las secretarías colegiadas no son beneficiosas para el partido porque son propiciatorias del continuismo que estamos recusando. La posición nuestra es la secretaría única.

¿Qué va a pasar con veteranos que serían desplazados de los cargos, como Jorge del Castillo, Mauricio Mulder, entre otros. Serán excluidos? En el aprismo no hay excluidos. Si ellos quieren hacer política, lo pueden hacer desde cualquier lugar e incluso desde la comisión política, como ocurrió en 1982, cuando Alan García fue elegido secretario general y en la comisión política tomaron asiento veteranos como Luis Alberto Sánchez. Pero la parte operativa la tiene que hacer la gente con ascendencia en el pueblo aprista, como lo tenemos nosotros.

Los que insisten en reelegirse reclaman que ellos recuperaron la democracia... Ellos no fueron los únicos, también nosotros, hay que recordarles que la Marcha de los 4 Suyos se hizo sobre la base del buró de organización, del cual Carlos Arana era el jefe y yo el secretario general. Insistimos que nos interesa defender la democracia de aventureros, porque la victoria de los aventureros es la derrota del pueblo y de los que hacen de la política un negocio o una aventura.